Amígdalas

Las amígdalas son tejidos de forma ovalada en la parte posterior de la laringe, donde, gracias a sus linfocitos y otras células inmunitarias, sirven como importantes filtros que capturan virus y bacterias que intentan ingresar a nuestro organismo por la boca o la nariz. Al mismo tiempo, las amígdalas producen anticuerpos que ayudan a luchar contra estos invasores.
Si la bacteria se adhiere a las amígdalas y no es eliminada por ellas, puede causar inflamación, es decir, angina.

Hay 3 tipos de amígdalas en nuestro cuerpo.
Las dos amígdalas de la garganta ya mencionadas ubicadas en la parte posterior de la laringe, luego una ubicada en la parte posterior de la nasofaringe, que se llaman las adenoides, y la última son las amígdalas en la parte posterior de la lengua llamadas amígdalas linguales.

Cuando hay infecciones frecuentes de las amígdalas o anginas frecuente, es probable que su médico recomiende la extirpación quirúrgica de las amígdalas, lo que se conoce como amigdalectomía. Es cierto que las amígdalas severamente y crónicamente devastadas pierden su función y actúan más como una fuente de infección que como un exterminador, pero incluso las amígdalas severamente dañadas y deformadas no puedan ser limpiadas, curadas y restauradas sus funciones.

Especialmente con el uso de Streptokill, esta misión se puede lograr de manera muy realista y, como lo demuestran muchas experiencias de pacientes, con su uso responsable para cada sensación inapropiada en la garganta, la recuperación de las amígdalas gravemente dañadas es realista en unos pocos meses. El uso responsable se refiere principalmente a la aplicación inmediata. Por lo tanto, Streptokill debe llevarse con usted y aplicarse inmediatamente tan pronto como su garganta comience a rascarse, aunque sea solo un poco. Incluso si solo tiene la sensación de que hay algo, que no va bien en su garganta, aplique Streptokill de inmediato, porque crea que la sensaciones son en la mayoría correctos y no tiene sentido retrasar la aplicación. Incluso si usa Streptokill en las amígdalas sanas, no hará nada malo.

Si evitamos a tiempo el desarrollo de una infección, daremos a las amígdalas espacio para una mejora permanente de su estado y de la función para la que están destinadas. De esta manera, las amígdalas se limpiarán con el tiempo y las nuevas infecciones no solo serán menos frecuentes en las amígdalas más sanas, sino que, sobre todo, tendrán una probabilidad significativamente menor de sobrevivir.